La diputada del PAN Castell de Oro señala que votará en contra de la minuta para prohibir y sancionar penalmente las terapias de reorientación sexual
La diputada Teresa Castell de Oro Palacios del Partido Acción Nacional dijo que votará en contra del dictamen a la minuta que reforma el Código Penal Federal y adiciona un artículo 465 Bis a la Ley General de Salud, para prohibir y sancionar penalmente las terapias de reorientación sexual, conocidas como Esfuerzos por Corregir la Orientación Sexual e Identidad de Género (Ecosig).
En declaraciones a representantes de medios de comunicación, la legisladora indicó que esta minuta va en contra de la libertad de los padres, los profesionistas de la salud y los ministros de culto.
“Aquí no se puede prohibir absolutamente nada, porque es prohibir la libertad, pero es dejar a los padres en grave riesgo, a los profesionistas de la salud y a los ministros de culto en total indefensión para que puedan ser llevados a la cárcel de dos a cuatro años y que éstos se acumulen, eso es un absurdo”, dijo.
Y es que se prevé que el pleno de la Cámara de Diputados discuta mañana viernes la minuta sobre terapias de conversión.
Castell de Oro Palacios explicó que esta iniciativa es contra la libertad de los padres de darles a sus hijos el desarrollo y los valores de acuerdo con su familia, y está disfrazadas de protección de derechos humanos.
Agregó que la iniciativa habla sobre las torturas y el abuso, lo cual ya está tipificado en la ley. “Lo que están tratando de hacer es dejar a los niños en total indefensión y confundidos.
“Lo que tenemos que hacer es votarla totalmente en contra. No podemos ir en contra de la libertad del padre, de los valores de nuestra familia, ese tipo de terapias; ellos hablan acerca de tortura, la tortura ya está tipificada, pero lo que quieren en el fondo es que los hijos sean del Estado y ellos decidan qué clase de educación” les dan, dijo.
Consideró que no pueden prohibirle absolutamente a ninguna persona que tome la terapia que desee para ir hacia un lado o para el otro, esa es una decisión personal.
“Quien se quiera curar, que se cure, pero aquí nadie puede prohibir que se deje de hacer lo que uno decida con el problema que tenga”, concluyó la diputada.