‘Si alguien puede mover a esta Nación, más allá de lo que la movimos nosotros con el Movimiento por la Paz, es esa Iglesia y son los jesuitas’: Javier Sicilia

Así como lo hizo el Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad, ahora la Iglesia Católica, tras el asesinato de los dos sacerdotes jesuitas, tiene la responsabilidad de movilizar al País en contra de la violencia y a favor de la paz, dijo el activista Javier Sicilia.

En entrevista, el poeta aseguró que desde la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa, en México no se habían registrado crímenes contra las denominadas “víctimas de excelencia” hasta el homicidio de los sacerdotes Javier Campos y Joaquín Mora en Chihuahua.

“Es la misma historia del asesinato de mi hijo y de sus amigos, al ‘Negro Radilla’ lo conocían todos, tenía denuncias, habían atrapado a ese muchacho corrompido por él, que era ‘El Ponchis’, y ‘El Ponchis’ dijo ‘el que me enseñó a destazar fue ese señor y ese señor en antros, mataba, descuartizaba y nadie lo había tocado, es decir, el gran problema es que hay en este grado de impunidad que alienta el crimen, porque si no te toca simplemente te envalentona y la sicología te vuelve una especie de intocable, de una especie de Dios, monstruoso, hasta que tocan una franja de lo que se llama por desgracia, porque hasta en este tipo de cosas, ‘víctimas de excelencia’, tocan esa franja, fue el caso de mi hijo, y se les acabó, pero para que lleguen a tocar esa franja, (antes) masacraron y destruyeron vidas enteras.

“Es el mismo tema de los jesuitas con el Gobierno de Andrés Manuel, la misma historia, la mismísima historia, víctimas de excelencia, llevábamos desde la masacre que realmente cimbró de la desaparición brutal de los 43 de Ayotzinapa hasta los jesuitas, no había habido una víctima de excelencia, debería de haberlas habido, había suficiente masacres, la que nos llevó a salir fue la masacre de la Familia Le Barón, mujeres y niños, y no conmovió a la nación como conmovió el asesinato de los jesuitas, como conmovió el asesinato de mi hijo, como conmovió al desaparición de los 43”, expresó.

Ante la violencia que azota al País y las denuncias públicas por la presunta protección que brinda el Gobierno federal a grupos del crimen organizado, Javier Sicilia dijo que así como en 2011 la sociedad mexicana salió a las calles a exigir paz convocada por el Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad (MPJD), ahora toca a la Iglesia Católica encabezar esa convocatoria.

“Ellos tienen la responsabilidad, cuando asesinaron a mi hijo, la comunidad de los poetas y de ciertas organizaciones de resistencia civil y de derechos humanos cargaron con esa responsabilidad y salimos a dar la cara, no por mi hijo nada más y por los muchachos, por la Nación y por las víctimas enteras.

“Ayotzinapa tuvo esa oportunidad, pero decidieron, perversamente y estúpidamente, y lo puedo decir porque tengo la calidad de víctima, encerrarse a negociar por 43 y ahí están los resultados. Los jesuitas tienen ahora y la Iglesia tiene ahora la responsabilidad, salieron con mucha dignidad y dieron un paso atrás, estas ‘jornadas de oración’ es un paso atrás y es una responsabilidad gravísima porque si alguien puede mover a esta Nación, más allá de lo que la movimos nosotros con el Movimiento por la Paz, es esa Iglesia y son los jesuitas”, expresó.

Sin embargo, lamentó, la Iglesia reculó en su intento por movilizar a la sociedad mexicana.

“Han reculado y eso es gravísimo, pero bueno, es una historia de esta iglesia mexicana, porque surgieron por primera vez, después de los 43, surgieron estas víctimas de excelencia, y tocaron una de las instituciones más importantes, no solo a la Iglesia, a esa particularidad que es la Orden de los Jesuitas, que tiene además un Papa, el Papa es jesuita, y no han tenido los arrestos, fuera de lo que hizo el Obispo (de Cuernavaca), que yo creo, Don Ramón, que fue un mensaje a sus hermanos obispos: ‘esto es lo que tenemos que hacer’, no lo entendieron, necesitan movilizar a la nación”, comentó Sicilia.

Los gobiernos corrompidos, aseguró, como el de Andrés Manuel López Obrador, solo entienden con movilizaciones nacionales.

“Los gobiernos, por desgracia, sobre todo en este País, sobre todo en Gobiernos tan corrompidos, que administran el infierno, y sobre todo con un Gobierno como el de Andrés Manuel, populista, movilizador de masas, la única forma de que entiendan es con una presión movilizadora nacional y con una propuesta, y las propuestas están, que no nos vengan a decir que las jornadas de oración son para hacer un diagnóstico, el diagnóstico ya está, y propuestas, las propuestas ahí están, la cosa es que hay que sentar a esa clase política, no solo a Andrés Manuel, a los partidos, los gobernadores, de cara a la Nación, como lo hizo el Movimiento por la Paz, y decirles ‘señores, aquí están y aquí están los expertos y de aquí no salimos hasta que se cambie la política, no de seguridad, la política integral de seguridad y paz y justicia’.

“Si la siguen viendo parcialmente, como si la inseguridad fuera un problema distinto al de la justicia, distinto al de la verdad, no estamos entendiendo nada. Es una política global y es una política de estado a corto, mediano y largo plazo y con un pacto nacional, no con los criminales, ya no es posible con ellos, pero sí con las clases sanas de la sociedades con empresarios, con las iglesias, con los ciudadanos, con las partes sanas de los partidos, eso es lo que tendría que estar haciendo ahorita la Iglesia, es su responsabilidad, no como la gran institución que es, sino su responsabilidad con respecto a Cristo”, dijo.

Para el fundador del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad, esa Iglesia Católica aún está a tiempo de encabezar y convocar a una movilización nacional en contra de la violencia.

“Ahorita todavía pueden salir después de las jornadas que terminan este mes a dar la cara por este País, a dar la cara por la enseñanza del Evangelio (…) y para recordarlo es una base de la teología cristina: la causa de Dios es la causa del hombre, no la causa de ninguna ideología y aquí el hombre, la mujer, los niños, en su parte genérica, el ser humano en general, está siendo humillado, el cuerpo de Cristo en los seres humanos está siendo destazado, humillado y si la Iglesia lo permite, si no sale a dar la cara después de tener estas víctimas de calidad, pues que se haga cargo frente a su consciencia y frente al misterio de Dios, pues”, dijo.

Por Héctor Raúl González (Central Noticias MX)