La Presidenta Claudia Sheinbaum subraya que el consumo y trabajo de mexicanos son clave para la economía estadounidense
Desde San Nicolás de los Garza, Nuevo León, la Presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, resaltó la importancia de los trabajadores mexicanos en Estados Unidos, afirmando que su participación económica contribuye significativamente al desarrollo del país vecino.
Citando datos del Peterson Institute for International Economics (PIIE), Sheinbaum explicó que el 80% de los salarios de los migrantes mexicanos se consume en territorio estadounidense.
La jefa del Ejecutivo señaló que, si los trabajadores mexicanos dejaran de consumir en Estados Unidos, la economía estadounidense se contraería más de un punto de su Producto Interno Bruto (PIB).
Comparó esta disminución con la eliminación del valor total generado por sectores como la agricultura, pesca y silvicultura en ese país.
Además, destacó que por cada 10 migrantes que trabajan en Estados Unidos, se crean entre uno y dos empleos para ciudadanos estadounidenses, demostrando el efecto multiplicador de la migración en el mercado laboral.
La Presidenta también advirtió sobre las implicaciones de reducir la migración legal en Estados Unidos. Según sus declaraciones:
- Una reducción del 50% de la migración legal en los próximos 10 años incrementaría la deuda del Seguro Social estadounidense en un 13%, con pérdidas estimadas en 1.5 billones de dólares a lo largo de 75 años.
- En contraste, si la migración aumenta, las reservas del Seguro Social podrían incrementarse en 284 mil millones de dólares en una década.
Además, señaló que incluso los migrantes indocumentados benefician a la economía estadounidense, al aportar 13 mil millones de dólares al año al Seguro Social, aunque no puedan reclamar los beneficios. De ese monto, el 92% favorece directamente a las y los estadounidenses.
Beneficios del T-MEC
Sheinbaum también defendió el papel del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) como un motor de desarrollo regional, destacando que genera empleos y bienestar para los pueblos.
Subrayó la mandataria que las empresas estadounidenses que invierten en México obtienen beneficios directos, ya que por cada 131 empleos creados en sus filiales mexicanas, generan 333 empleos en Estados Unidos.
Con estas cifras, la mandataria reiteró la importancia de fortalecer la colaboración económica y social entre los países, subrayando el papel de los migrantes como una pieza fundamental en el equilibrio económico de Norteamérica.