De 1.75 dólares por pastilla de fentanilo, ahora se vende en 45 centavos en el mercado negro, debido a la saturación del mercado provocado por el Cártel de Sinaloa
El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha informado que las pastillas contaminadas con fentanilo han comenzado a abaratarse significativamente en las calles, debido a una saturación del mercado ilegal provocada por el Cártel de Sinaloa.
Según cifras del departamento basadas en una investigación de tres años en la frontera de California, el precio de estas pastillas, que en 2021 se vendían ilegalmente entre $1.75 y $1.65 dólares cada una, ha caído drásticamente a 45 centavos de dólar en el último mes.
La precipitada caída del precio refleja el aumento de la oferta y disponibilidad de fentanilo que se contrabandea a Estados Unidos por parte del Cártel de Sinaloa, indicó un portavoz del departamento.
La disminución del precio del fentanilo en el sur de California coincide con un alarmante aumento de muertes por sobredosis de este opioide en Baja California.
Por ejemplo: el Servicio Médico Forense (Semefo) de Baja California informó a finales de mayo que el 30% de los cadáveres analizados contenían restos de fentanilo.
Por su parte, la Cruz Roja en Tijuana reportó que una de cada cuatro emergencias que atienden es por sobredosis de fentanilo, aunque han logrado salvar vidas gracias a la inclusión de naloxona, un antídoto contra opioides, en sus recursos.
La información sobre la caída de precios se dio a conocer en el contexto de una operación del Departamento de Justicia que resultó en el arresto de 36 personas acusadas de operar para el Cártel de Sinaloa en la frontera de California, y la búsqueda de otros 11 acusados que aún se encuentran prófugos.
En el operativo, participaron unos 400 oficiales federales de diversas corporaciones, llevándose a cabo principalmente en ciudades del condado Imperial, al este de San Diego.
Las acciones se fundamentaron en cuatro encausamientos simultáneos que acusan a 47 personas de trabajar para el Cártel de Sinaloa, con cargos por conspiración, distribución de metanfetaminas y portación ilegal de armas.
Todos los acusados enfrentan potencialmente cadena perpetua.
Entre los 36 detenidos hasta la fecha, dos residían en Mexicali: Araceli Rangel Torres, de 28 años, y Carlos Valencia Mendoza, de 29. Aunque los documentos no especifican su nacionalidad, estos cargos se formularon con base en investigaciones detalladas.
El impacto de la proliferación de fentanilo es evidente tanto en la caída de precios de las pastillas contaminadas como en el aumento de emergencias médicas y muertes en la región, reflejando la gravedad de la crisis provocada por el tráfico de drogas.
