Mujeres tienen más afectaciones en la salud mental por trabajo no remunerado
El trabajo no remunerado puede ser un factor para el deterioro de la salud mental en mujeres, revela nueva investigación de la Universidad de Melbourne.
Investigadores de la Universidad de Melbourne revelaron que el trabajo no remunerado está relacionado con una peor salud mental en las mujeres, pero los efectos son menos evidentes para los hombres. De acuerdo con 11 de los 14 estudios revisados, mujeres presentaron un aumento de síntomas depresivos o angustia laboral con el aumento de las demandas laborales no remuneradas.
México cuenta con 69 mil 128 mujeres que realizan un trabajo no remunerado, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Asimismo, el INEGI destacó que 32.5 por ciento de los mexicanos se han sentido deprimidos alguna vez en su vida.
La investigación, publicada en The Lancet Public Health, reunió y evaluó evidencia que examina la asociación de género entre el trabajo no remunerado y la salud mental. En ese sentido, se revisaron 14 estudios, dando un total de más de 66 mil 800 trabajadores a nivel mundial.
Cinco estudios analizaban el trabajo no remunerado, tales como en algunos casos del cuidado, servicios de salud y educación. Por su parte, nueve examinaron el tiempo de trabajo doméstico y, entre esos, cuatro analizaron el cuidado de los niños.
Entre los resultados de los investigadores, se encuentra la penalización económica experimentada por las mujeres al asumir casi toda la carga laboral. El asumir gran parte de dicha carga, lleva consigo un costo para la salud mental.
Por una parte, en 11 de los 14 estudios examinados, las mujeres afirmaron tener alguna repercusión en su salud mental. Sin embargo, los hombres solo informaron asociaciones negativas en tres de los 12 estudios.
Jen Erving, líder de la investigación comentó que la doble carga de trabajo pagado y no pagado expone a las mujeres a un riesgo mayor de sobrecarga, pobreza de tiempo y peor salud mental. Según lo explicado, las mujeres intercambian horas de trabajo remunerado para cumplir sus responsabilidades laborales no pagadas de forma desproporcional.
En ese sentido, el estudio busca destacar la necesidad de una mayor atención y una acción significativa para estimular una mayor equidad en la división de trabajo no remunerado. Erving aseguró que si los hombres asumen su parte equitativa hay una mayor potencialidad de mejorar la salud mental de las mujeres.
Adicionalmente, los investigadores dicen que es necesario hacer cambios urgentes sustantivos en determinadas políticas. Entre las políticas que deben de cambiar están el cuidado universal de los niños y la normalización de arreglos laborales flexibles para hombres.
Sin embargo, concluyeron que la revisión necesita más investigaciones en diferentes longitudes de alta calidad. Además, se debe de comprender mejor los matices dentro de las diferentes áreas del trabajo no remunerado, así como la necesidad de un enfoque coherente sobre cómo se define y mide el trabajo no pagado.