La decisión del juez Alejandro Martínez, al dejar libre al agresor de una menor y el motivo por el que lo hizo causó indignación entre la sociedad.
El pasado 15 de febrero de 2024, el juez Juan Manuel Alejandro Martínez Vitela, Tribunal Superior de Justicia del Estado de México, absolvió a Alejandro «N», presunto violador de una niña de cuatro años, quien además es su sobrina.
Ante la decisión de otorgarle la libertad al presunto violador, la madre de la víctima, Victoria Figueiras, cuestionó la decisión del juez, pues señaló que cómo era posible que la menor pudiera detallar la hora, dirección y fecha de la agresión.
Una semana después, a través de redes sociales, colectivos feministas difundieron el video de la absolución del juez, donde se muestra un fragmento del diálogo de la madre lleno de impotencia.
«¿Una niña de cuatro años tiene que saber la dirección de la casa del tío que abusó sexualmente de ella, el día y el horario exacto en que fue agredida?», cuestionó la madre.
Convocan a bloqueo en Periférico por decisión del juez Alejandro Martínez
Activistas y colectivos feministas se manifestaron sobre Periférico Norte, lo que provocó un bloqueo de más de cinco horas, esto, ante la controversia de la resolución del juez Juan Manuel Alejandro.
El caso ha puesto en la mira falta de sensibilidad y criterio del sistema judicial ante casos de violencia sexual infantil, así como la revictimización de las mujeres, en este caso, el de la menor violentada.
Poder Judicial del Estado de México respalda al juez
Ante las protestas y manifestaciones tanto en redes sociales, como en el Poder Judicial del Estado de México se pronunció en redes sociales y respaldó al juez Martínez Vitela.
De acuerdo al poder judicial, se absolvió al acusado, ya que no existieron medios u órganos de prueba que permitieran reconstruir cada uno de los hechos y circunstancias aseveradas.
Además, informaron que de cuatro periciales en materia de psicología, sólo uno hace referencia a indicadores psicológicos de víctimas de violencia sexual y que además un meta peritaje demostró fallas metodológicas, como la ausencia de pruebas psicométricas adecuadas.
Sin embargo, ante la presión de los medios, colectivos y otras figuras del poder judicial, el comunicado fue dado de baja, ya que justificaba la liberación del presunto abusador por “errores de precisión”.