Ante las medidas migratorias impuestas por el Gobierno de Estados Unidos, Ricardo Monreal, aseguró que México saldrá adelante y cuidará, por encima de todo, los derechos humanos de quienes en su transitar están en la búsqueda del ‘sueño americano’.
Al advertir que México debe cuidar los derechos humanos de millones de migrantes frente a medidas impuestas por Estados Unidos, el senador Ricardo Monreal, sostuvo que la aplicación del Título 42 y del Título 8, tendrán consecuencias, sobretodo en las ciudades fronterizas de nuestro país, donde hay menos capacidad de asilo y de admitir a mil migrantes diarios expulsados o deportados de Norteamérica.
“Medidas difíciles, duras, que van a afectar a aquellos que desean traspasar o trasladarse al vecino país del norte”, puntualizó.
Durante una participación radiofónica, el líder de la mayoría en el Senado de la República, explicó que el Título 42 del Código Federal de los Estados Unidos es una medida sanitaria que se implementó el 20 de marzo de 2020, por el entonces presidente Donald Trump.
Abundó que en su momento Trump, otorgó al Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de esa nación, la facultad de tomar medidas sanitarias para prevenir la propagación de enfermedades contagiosas, en ese caso por la Covid-19.
Con ello, se suspendió el ingreso de ciertas personas extranjeras a ese país, con autoridad para expulsarlos sin permitirles ingresar al proceso normal de inmigración o asilo.
Monreal, recordó que México aceptó, por razones humanitarias, la devolución desde Estados Unidos a migrantes de Guatemala, El Salvador, Honduras, Venezuela, Haití, Nicaragua, Cuba, entre otros.
Apuntó que, desde 2020, el Título 42 se ha aplicado de manera continua y ha acumulado a cerca de tres millones de expulsados.
A todo esto, el presidente Joe Biden anunció que el 11 de mayo de 2023, se dejaría de implementar ese instrumento, al tiempo que se anunciaron una serie de medidas adicionales para procesar y contener el inminente aumento de cruces irregulares en la frontera entre Estados Unidos y México.
“Es una medida dura, pero electorera en aras de mantener y aumentar su apoyo frente a una elección presidencial que se antoja competida”, manifestó.
En este sentido, destacó que, a partir del 12 de mayo, comenzó a aplicarse entre el Título 8, con la cual se deportaron a más de tres millones de migrantes en ocho años, durante la administración de Obama.
Afirmó que dicho mecanismo no expulsa a los migrantes irregulares de territorio estadounidense, sino que los deporta y se les impone una carga penal con un antecedente de orden criminal, sin poder ingresar a Estados Unidos durante cinco años por ninguna vía.