JD Vance y Tim Walz se enfrentaron en el debate vicepresidencial
Los candidatos a vicepresidente, el republicano, JD Vance, y el demócrata, Tim Walz, se enfrentron en lo que puede ser el último debate antes de las elecciones
Aunque es probable que Kamala Harris y Donald Trump no vuelvan a enfrentarse en un debate presidencial, sus candidatos a vicepresidente ofrecieron la oportunidad de alcanzar al público un último cruce de ideas entre demócratas y republicanos. El debate vicepresidencial transmitido por NBC en la noche del 1 de octubre tuvo un nivel mucho más distendido que el ultimo encuentro entre los candidatos presidenciales, aunque sin dejar de lado los temas de mayor interés.
Con un apretón de manos, el debate comenzó con un tono mucho más cordial que el de sus compañeros de fórmula. El demócrata, Tim Walz, y el republicano, JD Vance, mantuvieron una conversación relativamente moderada sobre los temas que están en la principal preocupación de los votantes estadounidenses de cara a las elecciones del 5 de noviembre.
Ambos candidatos pasaron la mayor parte del tiempo atacando al compañero de su rival. A lo largo de cada tema, Vance aseguró que Kamala Harris debería aplicar sus promesas de campaña durante su actual administración, mientras que Walz acusó a Donald Trump de sabotear las políticas bipartidistas que se enfocaban en temas que le preocupan a todas las antípodas política, como la inmigración.
Sin embargo, ambos candidatos tuvieron momentos de debilidad. Walz se mostró vacilante e inseguro sobre el ataque con misiles iraníes del martes contra Israel y si los candidatos apoyarían un ataque preventivo israelí contra Irán. El gobernador de Minnesota rara vez habla de política exterior. Además, el candidato demócrata a vicepresidente no logró sostener su afirmación de que había estado en Hong Kong durante las protestas en la Plaza de Tiananmen en 1989. «A veces soy un tonto«, dijo Walz asegurando haberse expresado mal y que estaba influenciado por los acontecimientos porque había llegado a China ese verano.
Por su parte, el senador de Ohio no tuvo respuesta cuando se le preguntó si Trump perdió las últimas elecciones presidenciales en 2020. El candidato republicano tuvo también que refractar comentarios que hizo en el pasado como cuando afirmó que Trump era el «Hitler de Estados Unidos». Vance aseguró haber cometido errores en el pasado. «Me equivoqué con Donald Trump», afirmó.
De todas formas, Vance se mostró confiado y cómodo, y su experiencia previa en intercambios televisivos fue evidente. A lo largo de la discusión, criticó las políticas de la vicepresidenta Kamala Harris, específicamente en torno a la clase media y la inmigración. Sus respuestas fueron fluidas y concisas, presentándose como un defensor de los ciudadanos de Ohio afectados por la migración indocumentada, argumentando que estas políticas han perjudicado a las comunidades locales.
Mientras tanto, Walz, aunque inicialmente se mostró vacilante cuando abordó temas de política exterior, fue ganando seguridad a medida que avanzaba el debate. Su postura respecto a la inmigración fue clara: señaló que la falta de colaboración bipartidista, especialmente entre los republicanos y Donald Trump, convirtió el tema en un mero punto de discusión, deshumanizando a los inmigrantes. Aunque Walz tuvo mayor contundencia en temas como el derecho al aborto, donde defendió la libertad de las mujeres para tomar decisiones sobre sus propios cuerpos, mostró cierta moderación cuando se trató del control de armas, lo cual pudo haber generado expectativas insatisfechas en algunos sectores demócratas.
Si bien cualquier declaración de los candidatos a vicepresidente pueden hundir la campaña de alguno de los dos partidos, los debates vicepresidenciales nunca tuvieron demasiado peso. Aun así, esta fue la última palabra de las dos formulas presidenciales antes de las elecciones de noviembre.