La vacuna, un aliciente para mi hija

Renata Alexa tiene 12 años de edad, es portadora del Síndrome de Down y este martes, recibió la vacuna contra el covid-19 en el Hospital del Niño DIF.

Maribel Paredes Bautista sonrió en todo momento. Desde el momento en el que entró al Hospital del Niño DIF, ubicado en Pachuca, se dijo «soy bendecida por Dios», porque a su hija Renata Alexa, quien tiene 12 años y es portadora del Síndrome de Down, le fue aplicada la vacuna contra el covid-19 este martes.

Entre risas, Maribel animó a Renata para entrar al auditorio del hospital en donde se aplicaron las últimas dosis para niñas, niños y adolescentes atendidos en el nosocomio infantil, y que ya tuvieran la protección.

«Sentí felicidad cuando me enteré por redes sociales, así como por la Jurisdicción del centro de salud que mi hija sería vacunada ya que, gracias a Dios, ella contará con su vacuna aunque esto no significará que ella no continúe aplicando las medidas sanitarias que ha aprendido y conoce bien», expresó con una sonrisa, Maribel.

Renata puso atención a las indicaciones del personal de salud que le aplicó la vacuna, «pero no me dolió nada», expresó después de que la inocularon, y su mamá le repitió que en caso de sentirse mal le avisara, «porque nos dijeron que podía presentarse fiebre o dolor en el sitio donde le fue aplicada la inyección», dijo.

Así, mientras pasaba la media hora de espera para ver si tenía una reacción, Maribel, Renata y su hermano veían una película infantil que fue proyectada para hacer amena la espera.

«Ahora estamos a la espera de que Renata regrese a la escuela, en cuanto así lo anuncien las autoridades sanitarias, porque ella está bien preparada y sabe que debe aplicar las medidas sanitarias en todo momento como el uso de cubrebocas, lavado de manos con agua y jabón, y sobre todo, que mantenga la sana distancia», expuso la madre.

Y mientras Alexa espera añicos a regresar a su escuela, «porque me gusta que me digan Renata, porque quiero ver a mis amigos y porque ya tengo mi vacuna», dijo, mientras los globos que soltaron en el auditorio, despejaron su atención y sonrió por ser una de las primeras niñas, menores de 12 años, en ser vacunadas contra el covid-19 en Hidalgo.