Políticas de Trump sobre IA, criptomonedas y comercio con China podrían transformar el panorama empresarial en Estados Unidos
En enero de 2025, Donald Trump asumirá la presidencia por segunda vez, controlando la regulación de una industria tecnológica que cambió profundamente desde 2017. Durante sus administraciones, tanto Trump como Joe Biden impulsaron medidas antimonopolio que reorientaron las expectativas de las grandes empresas tecnológicas y generaron presiones políticas diversas. Los ejecutivos de las principales empresas tecnológicas parecen haber adoptado una postura más apolítica, aunque continúan realizando cabildeos privados para influir en las políticas.
Con la postura del próximo presidente de Estados Unidos se podría representar una menor restricción para la inteligencia artificial, en comparación con las medidas implementadas durante el gobierno de Biden. En su anterior mandato, Trump firmó una orden ejecutiva de seguridad de IA. El nombramiento de sus colaboradores y el criterio hacia firmas como Google o Meta podrían definir las posibles resoluciones en conflictos legales pendientes contra grandes empresas tecnológicas.
Sobre la situación de TikTok, mantiene una postura ambivalente. Anteriormente intentó prohibir la aplicación, aunque recientemente expresó que vetarla solo beneficiaría a competidores como Meta. Si el Tribunal de Apelaciones del Circuito de DC respalda la ley que obliga a ByteDance a vender TikTok, Trump podría extender el plazo de desinversión hasta 90 días, aunque los límites legales le impiden simplemente desechar esta ley.
Por otro lado, los antecedentes se orientan a que la guerra comercial con China se mantenga. Las medidas de protección económica como los aranceles del 60% o 100% según el caso, plantean incertidumbre para las empresas tecnológicas que dependen de piezas chinas, como Apple y Tesla.
Las políticas de telecomunicaciones y moderación de contenido podrían flexibilizar el control de empresas sobre la neutralidad de la red, con menos restricciones a la concentración de medios y normas de moderación más permisivas. Los analistas estiman alrededor de un 90% de probabilidades de que la FCC abandone la regulación de los proveedores de banda ancha bajo su mandato.
Relacionado con las criptomonedas, la industria podría ver un entorno más favorable, con la destitución del presidente de la Comisión de Bolsa y Valores (SEC), Gary Gensler. Donald Trump expresó su deseo de convertir a Estados Unidos en una «superpotencia de bitcoin,» apoyado por importantes figuras del sector.
