Gretchen Atilano, ejemplo de cambio generacional en la política de Hidalgo

El plan de acción de la joven alcaldesa, pretende convertir a Tizayuca en un lugar próspero y un faro de esperanza para quienes quieren hacer oír su voz en el ámbito político.

A lo largo de la historia, las mujeres han enfrentado una lucha constante por abrir brechas y romper barreras en diversos ámbitos. Sobre todo en la política, donde el esfuerzo ha sido fundamental para garantizar que sus voces sean escuchadas y accedan a posiciones de poder para la toma de decisiones.

En este contexto, en Tizayuca, se erige como un ejemplo significativo del cambio
generacional que está transformando a la política local, la presidenta municipal, Gretchen Atilano Moreno, quien con apenas 29 años es la alcaldesa más joven del estado de Hidalgo.

Su llegada a la alcaldía representa un logro personal, pero también simboliza el avance de la representación femenina a espacios que históricamente les eran negados.

En el caso de Gretchen, quien ocupó previamente un lugar en el cabildo de Tizayuca durante el periodo 2020-2024, demostró ser una líder comprometida con su comunidad,
enfrentando los retos de esta demarcación que forma parte de la Zona Metropolitana del Valle de México.

La ubicación geográfica de Tizayuca plantea desafíos únicos; al ser el único municipio que debe normar la urbanización acelerada, la movilidad y la necesidad de servicios públicos eficientes, Atilano ve oportunidades para implementar un gobierno inclusivo y centrado en las necesidades de la ciudadanía.

El trabajo de la nueva alcaldesa va más allá de la simple administración: trabaja para
empoderar a las y los ciudadanos, y hacerlos partícipes en la toma de decisiones.

A través de su programa «Bienestar en Movimiento», ha llevado su gobierno a cada colonia, estableciendo un diálogo directo con los habitantes. Este enfoque cercano y moderno es un claro indicativo de cómo las nuevas generaciones están redefiniendo la política, alejándose de estructuras rígidas y promoviendo un gobierno cercano a la gente.

Cada avance es el resultado del esfuerzo colectivo de muchas mujeres que han trabajado para derribar barreras y desafiar estereotipos. Al romper el techo de cristal y
desafiar las normas establecidas, Gretchen abre caminos y con cada paso hacia adelante, siembra las semillas de un cambio duradero en la política mexicana.