Identificar las situaciones en las cuales es probable gastar más dinero puede ser clave para predecir patrones de gasto en las personas
Por Andrés Zimbrón
Tener pensamientos específicos puede ser el secreto para que las personas gasten su dinero sanamente y así, prevengan las inversiones de forma inconsciente.
Pensar en dinero es una situación muy cotidiana entre las personas, pero planear de forma errónea o acertada puede influir de forma directa en lo que se hace con él. Así lo reveló un estudio realizado por la Universidad de Georgia en Estados Unidos, donde se aseveró que algunos pensamientos financieros pueden cambiar la perspectiva financiera.
De acuerdo con los investigadores, plantearse diversas ideas financieras, puede dar una idea de los gastos y potencialmente ayudar a las personas a modificar su comportamiento a futuro. El estudio incluyó a 230 voluntarios, quienes respondieron con mayor frecuencia las siguientes afirmaciones:
- «Puedo ser capaz de predecir las situaciones en las cuales gastaré más de lo debido«.
- «Sé lo que debo hacer de forma diferente para administrar mejor mi dinero«.
- «Sé lo que me motiva a gastar o ahorrar y la forma en cómo lo hago«.
Además, los voluntarios informaron la clase de hábitos financieros que suelen llevar a cabo. Por ejemplo, formas de ahorro, consumos diarios, gastos mayores, gastos innecesarios, entre otros. Así pues, tras concluir el estudio, los investigadores encontraron una conexión entre la forma en que piensan las personas sobre sus finanzas y su manera de gastar el dinero.
Las personas con un mayor conocimiento financiero, encontraron una mayor motivación para alterar los patrones de gasto y reducir la ansiedad sobre sus finanzas personales. En contraste, cuando los voluntarios desconocían cuánto gastaban o no tenían un control concreto de sus gastos, el dinero no rendía y tenían problemas para identificar sus deudas.
Kristy Archuleta, autora principal del estudio, explicó: «Todos podemos tener problemas al momento de pensar en qué debemos hacer con el dinero, pero debemos ser consientes en cómo se gasta. Sé que debo levantarme y hacer ejercicio todos los días, sé que debo comer más frutas y verduras, ¿pero hago esas cosas? Para mí, depende del día, pero ese es el punto: lo mismo ocurre con nuestro dinero«.
Un punto clave fue que los voluntarios identificaron situaciones en las cuales es probable gastar más, ello les permitió predecir diversos desencadenantes. Si llegaron a ubicar estos puntos de la manera adecuada y fueron conscientes de ellos, encontraron más soluciones para evitarlos.
Para Archuleta, averiguar el origen del impulso de gastar o ahorrar es el principal motor para hacer cambios duraderos en los presupuestos. «Si se motiva a ahorrar dinero, lo más probable es que se pueda hacer y, a través de la constancia, se convierta en un hábito» concluyó la experta.
Aunado a ello, si no se es consciente de todo lo gastado durante una semana o un mes, ahorrar puede ser muy difícil y sucedería lo contrario, gastar más de lo debido. Ello proporciona un punto de entrada a fin de profundizar en las razones por las cuales las personas ahorran o gastan su dinero de forma errónea.
Hoy en día, tener un cuidado adecuado del dinero puede ser clave para fortalecer las finanzas personales y mejorar a mediano y largo plazo la estabilidad económica. Por ello, el estudio realizado por la Universidad de Georgia pone de manifiesto la importancia de que las personas planteen diversas situaciones financieras con el objetivo de encontrar soluciones óptimas.