Durante la sesión del Consejo de Seguridad de la sede de la Organización de Naciones Unidas el canciller mexicano pidió a los fabricantes cooperar para tener un mayor control de las armas y evitar que terminen en manos de la delincuencia organizada.
Ciudad de México.- El Secretario de Relaciones Exteriores Marcelo Ebrard encabezó esta mañana una reunión en la sede de la Organización de las Naciones Unidas, donde participó en el debate sobre El impacto del desvío y tráfico de armas para la paz y la seguridad.
Destacó que Naciones Unidas ha hecho esfuerzos para el control de armas, sin embargo, estos “son insuficientes”.
Por ello, Ebrard destacó la necesidad de que los países cuyas industrias producen una mayor cantidad de armas de fuego ligeras refuercen su regulación para combatir el tráfico ilegal y que éstas no lleguen a grupos del crimen organizado.
El canciller mexicano reconoció que el tráfico de armas es un fenómeno global que afecta gravemente a la población civil, propicia la violencia, genera desplazamientos de personas que buscan contextos de seguridad.
Añadió que las cifras indican que diariamente en el mundo mueren alrededor de 500 personas y unas dos mil resultan heridas con armas de fuego, las cuales provienen del mercado negro.
Apuntó además que el 75 por ciento de los homicidios y feminicidios en Latinoamérica se dan con armas de procedencia ilícita por lo que pidió combatir el fenómeno del tráfico de armas y reforzar compromisos, buscando la cooperación con el sector privado.
“México cree firmemente que no basta con que el Consejo promueva y fortalezca esquemas de gestión de armas y municiones, sino que es imperativo atender el ciclo completo de vida de las armas, incluidas la intermediación, la transferencia y los usuarios finales”.
Abundó que las gestiones deben poseer un enfoque preventivo, como se debatió allí mismo durante la semana pasada con el fin de mejorar la identificación de riesgos y evitar que las armas caigan en las manos equivocadas.
Por otro lado, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), dijo que el Gobierno mexicano dará respuesta legal a las once empresas fabricantes de armas en Estados Unidos a las que demandó hace tres meses por la presunta negligencia que se da al permitir el tráfico ilícito de armamento lo que genera la violencia en México.
Y es que, de acuerdo con las cifras, han entrado a territorio nacional, medio millón de armas de Estados Unidos desde 2004 al país,
Esas empresas venden cada año más de 340 mil pistolas que son utilizadas en México.
“Las armas encontradas en las escenas del crimen en México, provienen de Estados Unidos”, detalla un comunicado emitido por la cancillería.