De acuerdo con el secretario de Seguridad Pública, Salvador Cruz Nery, la aeronave sigilosa nunca fue equipada con la herramienta más importante para que funcionara, una cámara de alta definición que captaría la actividad delictiva en la entidad.
El avión sigiloso que fue “vendido” por el gobierno de Omar Fayad como una importante arma tecnológica contra la delincuencia, resultó todo un engaño para la población pues por su alto costo nunca fue equipado con su herramienta principal, las cámaras de alta definición.
“El sigiloso no está funcionando, mentiría en decirle que está funcionando, está en revisión si se adquiere o no se adquiere”, reveló el actual secretario de Seguridad Pública del Gobierno de Hidalgo, Salvador Cruz Nery.
El funcionario estatal dijo que la aeronave, actualmente está en desuso pues no tendría caso que se hicieron sobrevuelos.
“La cámara que actualmente tiene, no funciona pues solo capta puntos o manchas, pero no imágenes que pudieran ayudar en la lucha contra la delincuencia”, aseguró.
Para el funcionario, los drones con los que cuentan son mucho mejores que el avión no tripulado.
Por ello, el actual gobierno evalúa si se lo queda o no, pues tendría que pagarlo y equiparlo con la tecnología que requiere para ello.
“Nos lo dejaron para probarlo, pero no nos funcionó, no es viable por la falta de cámaras”, mencionó Cruz Nery.
Fue en agosto de 2017 cuando el entonces gobernador Omar Fayad Meneses anunció que su gobierno había contratado el avión sigiloso que estaría bajo el servicio de la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo, para la lucha anticrimen y especialmente para combatir el delito de “huachicol”.
Se dijo que el «Sigiloso», era un avión tripulado de última generación con cámaras de primer nivel que monitoreaban las actividades criminales en Hidalgo, pero ahora se sabe que la aeronave no contaba con las cámaras de última generación que se dijo tenían, quizás por ello, el anterior gobierno no asestó jamás ningún golpe contra las bandas de huachicol que operan en una decena de municipios.
El avión de tipo solar tripulado que se dijo era propiedad del gobierno del estado, se puso incluso a disposición del Gobierno Federal, a efecto de combatir el robo de combustible, pero el actual secretario de Seguridad Pública Salvador Cruz Nery aseguró que este sigue siendo propiedad de una empresa privada que lo dejó en calidad de “prueba”, al nuevo gobierno.
Cabe destacar que, como parte de las características del avión sigiloso, se dijo que era difícil detectarse a simple vista y la emisión de ruido es bastante baja, lo que le permitía pasar desapercibido.
Otra característica es que la aeronave alcanza los 30 mil pies de altura y a esa altitud, los pilotos apagan el motor y lo convierten en un avión planeador “cero ruidos”. Capaz de vigilar y realizar labores de inteligencia, sin ser detectados, desde el aire.
“Puede permanecer en vuelo hasta un periodo de ocho horas».
El avión sigiloso cuenta con dos cámaras de largo alcance.
Una digital, con la que trabajan durante el día, y otra infrarroja para detectar actividades ilícitas durante la noche.
La aeronave está diseñada para sólo dos tripulantes. Uno pilotea y el otro opera el sistema de videovigilancia.
El avión “antihuachicol” comenzó a utilizarse por la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo desde agosto de 2017.
Cabe destacar que, a diferencia del gobierno de Julio Menchaca, que en los primeros 10 meses de Gobierno, aseguró 2 millones de litros de hidrocarburo robado, en cuatro años, Omar Fayad ni con toda su “tecnología” pudo combatir a la delincuencia, ni mucho menos a los huachicoleros.
Contamos en operación un avión táctico sigiloso con cámara térmica para labores de investigación y 20 drones que nos permiten sobrevolar la entidad, recabando información en tiempo real, con cámaras de alta definición, para apoyar a los agentes en campo. #C5iHidalgo pic.twitter.com/uBr8M0yCmb
— Omar Fayad (@omarfayad) May 8, 2019
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