La ingesta de aspirina estaría asociada a sangrado gastrointestinal, úlceras y otras problemáticas
Expertos del Hospital Houston Methodist aclaran cuáles son las consideraciones más adecuadas para consumir aspirina si se busca prevenir ataques cardíacos.
De acuerdo con un comunicado de Hospital Houston Methodist, compartido con NotiPress, las capacidades anticoagulantes de la aspirina pueden ser capaces de prevenir ataques cardíacos.
Sin embargo, existen una serie de consideraciones previo a tomar este tipo de medicina en casos de problemas con el corazón.
«La aspirina diaria en dosis bajas puede ser importante en la prevención y tratamiento de enfermedades cardíacas, pero no siempre es necesaria. El problema con la aspirina, incluso en dosis bajas, es que puede causar sangrado gastrointestinal, úlceras y accidente cerebrovascular hemorrágico», apuntó Joshua Septimus, profesor asociado del Hospital Houston Methodist.
Por ello, expertos de dicho hospital creen que la aspirina, como medicamente para prevenir ataques cardíacos, debe utilizarse con cuidado.
Por ejemplo, según los especialistas, dosis bajas de entre 75 y 100 miligramos no han mostrado tener una mejoría en adultos mayores.
Así, la recomendación de los médicos del Hospital Houston Methodist en torno a la aspirina para tratar ataques cardíacos es que se use, primordialmente, en adultos de 40 a 59 años. Sobre todo si estos últimos tienen alto riesgo de sufrir alguno de estos percances.
Igualmente, se debe consultar con algún médico de cabecera el riesgo real de poder padecer esta clase de afecciones.
Esto es de esa forma debido a que de ser necesario, un especialista es el único apto para determinar el nivel real de calcio en la arteria coronaria (CAC). Este último factor podría dilucidar cuánta placa existe en las arterias, ya que es esta una de las causantes de ataques cardíacos.
«Cuanto más alto sea tu puntaje de CAC, más placa tendrás en tus arterias. Es una representación mucho más precisa de tu verdadero riesgo de ataque cardíaco y accidente cerebrovascular y puede ayudar a confirmar si podrías beneficiarte de la aspirina diaria», apunta Septimus.
Asimismo, sería importante realizar pruebas adicionales para disminuir el riesgo de sangrado como producto de la ingesta de la medicina antes mencionada.
«Estas nuevas pautas son un reflejo de lo que los médicos ya han estado practicando en la clínica durante años», concluye el doctor.
Por consiguiente, antes de tomar la decisión de si consumir aspirina para prevenir ataques cardíacos, se debe consultar a un especialista que observe los riesgos a los cuales nos podríamos exponer.
Esto sería parte de un protocolo capaz de determinar si una persona puede ingerir tal medicina y en qué medida debe hacerlo.