La Policía Federal de Brasil presentó cargos contra el expresidente Jair Bolsonaro por alteración de datos en el certificado de vacunación contra el Covid de él y sus cercanos
Jair Bolsonaro, expresidente de Brasil, fue imputado por asociación criminal y por falsificar sus propios datos y los de su familia en el registro de vacunación contra el COVID-19, informó la Policía Federal de Brasil este 19 de marzo.
La Corte Suprema publicó este martes la acusación de la policía que alega que Bolsonaro y otras 16 personas insertaron información falsa en la base de datos de salud pública para que pareciera que el entonces presidente, su hija de 12 años y varios otros en su círculo se habían vacunado contra el virus SARS-CoV-2.
Según la investigación, hubo una trama montada para falsificar cartillas de vacunación anticovid con el objetivo de que sus beneficiarios pudieran saltarse las restricciones sanitarias en terceros países durante la pandemia.
Bolsonaro fue uno de los pocos líderes mundiales que criticó abiertamente las vacuna contra el COVID-19, desobedeciendo las restricciones sanitarias y alentando a la sociedad a seguir su ejemplo en la pandemia.
Se señala que su administración ignoró varios correos electrónicos de la compañía farmacéutica Pfizer que ofrecía vender a Brasil decenas de millones de inyecciones en 2020 y criticó abiertamente una medida del entonces gobernador del estado de Sao Paulo, João Doria, quien ordenó la compra de vacunas de la empresa china Sinovac cuando no había otras dosis disponibles.
La fiscalía general de Brasil tendrá la última palabra sobre si utilizar la acusación policial para presentar cargos contra Bolsonaro ante la Corte Suprema.
Esta es una de varias investigaciones dirigidas contra Bolsonaro, además de la tentativa de golpe de Estado tras las elecciones de 2022, que ganó el actual gobernante, Luiz Inácio Lula da Silva.
En mayo de 2023, la Policía registró la casa de Bolsonaro en Brasilia en el marco de esta causa y detuvo entonces a seis sospechosos, entre ellos Mauro Cid, dos de sus guardaespaldas y un militar que actuaba como asesor del ex jefe de Estado.
En el transcurso de las diligencias, las autoridades detectaron “la existencia de indicios de inserción de datos falsos sobre la vacuna contra la covid-19″ en relación con el entonces presidente brasileño, que gobernó entre 2019 y 2022.
En declaraciones a la agencia Reuters, el ex presidente dijo sentirse tranquilo.
«Es una investigación selectiva. Estoy tranquilo, no debo nada» (…) «El mundo sabe que no tomé la vacuna», apuntó Bolsonaro