La próxima semana, 12 de julio para ser exactos, el presidente Andrés Manuel López Obrador tendrá una visita a la capital del vecino del norte, Washington, para entrevistarse con su homólogo Joe Biden. López Obrador propondrá a Joe Biden emprender un plan conjunto contra la inflación.
Pocas fronteras en el mundo son tan grandes, tan complejas y tan cargadas por el simbolismo como la que separa a México y a los Estados Unidos. De un lado, la identidad de México está firmemente enraizada en la herencia latina o, mejor dicho, española. Del otro, los Estados Unidos de América son, sin lugar a dudas, la nación que representa el máximo triunfo de la cultura anglosajona, con todas sus peculiaridades.
Así, separados por la cultura y unidos por la geografía, México y Estados Unidos comparten dos siglos de tormentosa historia, marcada por el recelo, las continuas intervenciones políticas y, particularmente, por la invasión que le costó a México más de la mitad de su territorio.
Andrés Manuel López Obrador, líder indiscutible del ejecutivo en este sexenio, no es un lego en historia queda claro que ha leído muchos libros acerca del tema y tiene un buen empleo de los conocimientos obtenidos a lo largo de estas lecturas. Para López Obrador todo lo que México necesita y requiere para su futuro está en su pasado milenario y trascendente.
“La cosa es simple hay que ser como Lázaro Cárdenas en lo social, como Benito Juárez en lo político y emular una honestidad y principios democráticos como Francisco I. Madero.”
La historia es para López Obrador la guía práctica que debe estar presente al realizar política en el país, no existe otra visión en su quehacer político como el rescate de las anécdotas históricas que dan lecciones para llevarlas a cabo día a día.
Es fácil entender la actitud de López obrador la democracia no es para él un concepto que este unido al liberalismo, debe ser una democracia popular; el gobierno es el pueblo organizado o, para decirlo de otra manera, el mejor gobierno es cuando el pueblo se organiza. La democracia es cuando el pueblo organizado se gobierna así mismo sin ninguna intervención del Estado. El pueblo sabe lo que quiere y lo que necesita.
Por eso y por el bienestar de las masas es necesario que sea:“Arriba los de abajo y abajo los de arriba” así de simple.
Totalmente alejado el pensamiento de López Obrador con el de los partidarios de derecha y básicamente con los del país del norte, los Estados Unidos, cuyas ideas se basan en la filosofía liberal que defiende la libertad individual, la igualdad ante la ley, y una reducción del poder del Estado.
La propia configuración arquitectónica de Washington, la capital de Estados Unidos, es un monumento al poder y la división del mismo.
Cada cuatro años, el presidente electo jura el cargo el 20 de enero en la escalinata del edificio del Congreso para a continuación recorrer la avenida Pennsylvania hasta la Casa Blanca.
Junto a la Constitución escrita mayor tiempo en vigor de cualquier país democrático del mundo. Estados Unidos cuenta con un amplio cuerpo de usos y tradiciones políticas que sorprenden y fascinan a cualquier politólogo.
Ese mismo presidente que recorre la avenida Pennsylvania fue elegido para el cargo el anterior mes de noviembre, el primer martes precedido por un lunes del citado mes (es decir, que no sea 1° de noviembre).
Es un proceso electoral inamovible, que no ha sido alterado en el caso de que el primer mandatario haya muerto en el cargo. Bien por causas naturales o violentas –Lincoln, Garfield, McKinley, Kennedy-, ni tampoco en caso de dimisión –Richard Nixon-.
Cuarenta y seis personajes han ocupado el cargo en los pocos más de 200 años transcurridos desde el acceso a la independencia del país, oficialmente, el nuevo presidente de la Casa Blanca Joe Biden, es el cuadragésimo sexto presidente.
Joe Biden representa un país que en absoluto ostenta ideas de izquierda, de hecho la política exterior e interior norteamericana desde el final de la segunda guerra mundial (1945) hasta la caída del muro de Berlín (1989) giró en torno a un objetivo fundamental: contener el avance del comunismo y las ideas de izquierda en los cinco continentes y de alguna manera ha pervivido contra los nuevos enemigos del siglo XXI –ahora llamados terroristas en lugar de comunistas sin embargo la idea es idéntica a la del siglo XX quien no apoya a los EU está en su contra- la nueva estrategia internacional norteamericana es precisamente impedir que surja un antagonista como lo fue la extinta URSS, una nueva recuperación económica mundial con la ayuda de países europeos que deben aumentar sus presupuestos en defensa militar y dejar a los norteamericanos prácticamente el derecho de usar los recursos energéticos de sus aliados.
Las ideas entre ambos mandatarios y los países que representan son antagónicas López Obrador es un claro personaje contrario a los norteamericanos, así como el actual inquilino de la casa blanca Joe Biden no comulga con la idea de que el pueblo sabe lo que quiere y lo que necesita, para el modelo económico que representa Biden es impensable que sea: “Arriba los de abajo y abajo los de arriba”simplemente no funciona así, no al menos para los norteamericanos y sus socios comerciales.
Una gran brecha se abre entre lo que ambos mandatarios buscan para sus pueblos y por lo que respecta al mandatario mexicano y acorde al pragmatismo histórico y político que ha llevado a cabo en México con respecto a Norteamérica López Obrador mantendrá una férrea línea que seguirá los pasos que hicieron en su momento los protagonistas de la historia nacional frente a los norteamericanos, siempre conteniéndolos, tratando de buscar el respeto de la nación norteamericana para no inmiscuirse en asuntos mexicanos, tratar de no ser un gobernante mezquino que esté bajo el mandato yanqui, buscar el respeto del vecino del norte y dejar en claro que México no es parte de Norteamérica; la búsqueda infatigable de ese respeto y autodeterminación del pueblo mexicano jamás subyugado a los norteamericanos.
Las ideas son irreconciliables ambos tienen ópticas distintas, educación, principios y contextos sociales antagónicos, solo la cordialidad y diplomacia lograrán cierto entendimiento
¿Tú lo crees?... quizá, quizá….