Así como alza generalizada de precios
Ciudad de México.- La contrarreforma energética que pretende aprobar Morena con lealtad ciega a los caprichos del presidente, representa un retroceso de medio siglo, porque hará más ineficaz y contaminante a la Comisión Federal de Electricidad (CFE), provocará más apagones en todo el país, además de un alza generalizada de precios, especialmente en el consumo de luz.
Así lo afirmó el dirigente de Acción Nacional Marko Cortés Mendoza, que de concretarse la aprobación de la iniciativa preferente del presidente López Obrador por parte de sus legisladores en la Cámara de Diputados, “este será un golpe muy duro a la frágil economía de las familias mexicanas”.
Cortés Mendoza indicó que México requiere una política eléctrica fuerte, que garantice confiabilidad del suministro, costos accesibles para los consumidores y un desarrollo sostenible que cuide nuestra salud con energías limpias y sin comprometer las necesidades del futuro.
La contrarreforma, explicó, es una salida a la pésima administración de Pemex, pues está produciendo más combustóleo que gasolina. “Como el combustóleo no tiene mercado por contaminante, el presidente quiere que lo use la CFE para producir energía mucho más cara que las energías limpias y renovables”.
El líder panista advirtió que cambiar las reglas del sector sin considerar los compromisos establecidos en tratados internacionales como el T-MEC, traerá problemas jurídicos a México por las inversiones en materia energética comprometidas en dicho tratado, además de que se inhibirán futuras inversiones y generación de empleos en plantas eléctricas.
Por eso, dijo Cortés Mendoza, las reformas aprobadas por Morena y sus satélites al sector eléctrico son un contrasentido, pues mientras otros países están apostando por inversiones privadas para la generación de energías limpias y renovables, en México se busca centralizar la producción eléctrica en la CFE a partir de combustibles fósiles.
El presidente del PAN mencionó que el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) ya estimó que la reforma de López Obrador elevaría 17 por ciento las tarifas eléctricas y que la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) recomendó a los diputados no aprobarla, ya que podría afectar la competencia y libre concurrencia en la generación y comercialización de energía eléctrica del país.