El presidente aseguró que el excanciller, Marcelo Ebrard, fue objeto de persecución política y mal visto por el gobierno anterior.
Durante la conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador, este lunes se le cuestionó sobre las acusaciones del ex canciller Marcelo Ebrard y presuntos actos de corrupción, por beneficio de inmobiliarias a personas cercanas, por lo que señaló que «tiene que salir a su defensa».
De acuerdo a un reportaje, la entonces Procuraduría General de la República, benefició a Ebrard con el no ejercicio la acción penal por presunto tráfico de influencias.
La investigación, señala al ex titular de la SRE, supuestamente entregó permisos de construcción a inmobiliarias a cambio de departamentos para su familia mientras era jefe de Gobierno.
Sin embargo, el mandatario federal detalló que ahora aspirante a la ‘Coordinación de los Comités de Defensa de la Transformación’, durante su cargo como jefe de Gobierno de la Ciudad, de México, «fue objeto de persecución».
“Sí sabía que Marcelo fue objeto de una persecución en ese tiempo (…) había una lanzada, se le acosó porque le echaron la culpa de que él había entregado los documentos del Registro Público de la Propiedad de la llamada ‘Casa Blanca’. Lo comenzaron a hostigar”.
Desde Palacio Nacional, López Obrador apuntó que él defiende a Ebrard Casaubón, ya que el aspirante a candidato presidencial de Morena, fue «mal visto» en el sexenio de Enrique Peña Nieto.
“No sabía esto, pero si sabía que Marcelo fue objeto de una persecución en ese tiempo. Por eso es extraño que se haya cancelado un proceso en su contra, porque Marcelo era mal visto por el Gobierno anterior. Me consta, tuvo incluso que irse a una especie de exilio voluntario, porque había una lanzada en contra de él”, indicó.
AMLO pide «no hablar de las corcholatas»
Ante este cuestionamiento, y en el marco del arranque de las campañas de las corcholatas de Morena, el presidente hizo un llamado y pidió evitar esos temas durante su mañanera.
El Ejecutivo Federal subrayó que esta temporada, ante el proceso que vive Morena, evitará hablar y opinar de sus participantes, con el fin de evitar que se piense que tiene un favorito.
«Les pediría de manera muy respetuosa, afectuosa, que no se traten estos temas o que me lleven a tratar estos asuntos, porque voy a contestar, ustedes son libres, pero sí, no quiero participar y que se sienta que estoy a favor o en contra, tengo que mantener el equilibrio, estoy obligado a eso, en este caso y en la elección constitucional, ya no hay señal, no hay línea. Como se dijo en un tiempo nada más que no se cumplió, la línea es que no hay línea», explicó