La diputada Minerva Carrasco Godínez, presidenta de la Comisión de Derechos Humanos, organizó en San Lázaro un conversatorio con representantes de la asociación Atlas Free.
La diputada Nelly Minerva Carrasco, presidenta de la Comisión de Derechos Humanos, encabezó el conversatorio titulado «La trata de personas por explotación sexual es una clara violación a los derechos humanos de niñas, adolescentes y mujeres».
La legisladora Carrasco recibió un documento con el propósito de impulsar la clasificación de la prostitución como una forma de violencia contra las mujeres, mediante reformas a la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia.
En relación con esto, manifestó que analizarán la propuesta y evaluarán la posibilidad de promover un punto de acuerdo para exhortar a las legislaturas estatales a comprender la conexión entre la prostitución y la trata.
La diputada morenista expresó su apoyo a todas las propuestas que beneficien a las mujeres y niñas del país.
Reconocer a la prostitución como un sistema de violación
Durante el conversatorio, Rita María Hernández, directora de Políticas Públicas de Atlas Free, resaltó la importancia de combatir la trata y la explotación sexual, así como de proteger a las mujeres y sus hijos.
Hernández enfatizó la necesidad de reconocer la prostitución como un sistema que viola los derechos humanos y perpetúa la violencia contra las mujeres.
La activista argumentó que el principal desafío radica en el ámbito local y en visibilizar a los explotadores.
Víctimas de prostitución y trata fueron abusadas sexualmente
Por su parte, Marta Torres, coordinadora de Políticas Públicas de Atlas Free, propuso analizar el tema de la trata de personas desde una perspectiva criminalista que se enfoque en los victimarios, centrándose en las víctimas y en la defensa de sus derechos.
Torres abogó por reconocer la prostitución como una forma de violencia contra las mujeres y por realizar un análisis de la situación que enfrentan, ya que las víctimas quedan excluidas.
Karla de la Cuesta, presidenta de la fundación Alas Abiertas, hizo un llamado a visibilizar que las mujeres en situación de prostitución son víctimas.
Aproximadamente el 80% de ellas ingresaron a este contexto cuando tenían alrededor de 14 años.
Según afirmó, el consentimiento que hayan tenido es irrelevante, ya que se trata de víctimas de trata que se han adaptado a un entorno de violencia sexual y explotación.
De la Cuesta mencionó que el 90% de las víctimas de prostitución y trata han sufrido abusos sexuales.
Al considerar este panorama, señaló la falta de comprensión en la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia sobre el hecho de que las víctimas de prostitución y trata padecen violencia sexual.
El mayor enemigo está en la legislación municipal
Julio César Guillén Bonifaz, asesor jurídico especialista en Derechos Humanos, relató que un análisis realizado en Atlas Free reveló que en la legislación municipal aún persiste un México que se asemeja al de los siglos XVII o XVIII.
En estados como Chiapas, la legislación estatal y municipal considera a las mujeres como objetos sexuales y permite que ejerzan la prostitución.
Guillén Bonifaz destacó la incongruencia de tener legislación que trata a las mujeres como ganado en pleno siglo XXI, a pesar de contar con leyes que protegen los derechos humanos y conocer los niveles de violencia existentes.
Ruth Gómez, coordinadora del proyecto Atlas Free México, argumentó que a nivel municipal existe una falta de coherencia en la protección de las mujeres víctimas de violencia; por lo que es necesario reconocer a las víctimas de trata y prostitución en la ley.