Cuando actuar ante un dolor de estómago tras comer en exceso
POR: DIANA PÉREZ
Durante las fechas decembrinas, de muchas reuniones y alimentos, es importante saber actuar ante un dolor de estómago para evitar padecimientos más graves, uno de los padecimientos comunes durante las celebraciones de Navidad, es el malestar estomacal por el exceso en el consumo de alimentos y bebidas con alcohol.
No obstante, este malestar puede tener diferentes orígenes, pues el estómago, coloquialmente, es un término para referirse a muchas partes internas del cuerpo ubicadas en esa área.
El Dr. Eamonn Quigley, jefe de gastroenterología y director del Centro de Transtornos Digestivos del Hospital Houston Methodist dijo a NotiPress «el tracto gastrointestinal no es inteligente para decirnos de donde proviene el problema».
Esto plantea respecto de la dificultad para ubicar el problema cuando tanto se resume a una sola palabra.
Sin embargo, hay situaciones comunes por las cuales sucede un dolor de estómago, como comer en exceso y el consumo de alimentos que producen gases.
Comer en exceso puede producir hinchazón, distensión o meteorismo, así como el consumo de alimentos que producen gas, pero también la manera de consumirlos tiene su impacto.
Por ejemplo, el comer deprisa puede ocasionar tragar mucho aire, y sufrir de estrés o tener cambios bruscos en la alimentación pueden causar distensión y derivar en una incomodidad en el área del estómago.
Los alimentos que contienen azúcares FODMAP (oligosacáridos, disacáridos, monosacáridos y polioles fermentables), que son más difíciles de digerir y desencadenan la producción de gas en el intestino.
Entre estos alimentos están el ajo, la cebolla, el trigo, frutas, miel, frijoles, legumbres, lácteos, frutas con semilla y alcoholes de fruta. Sobre todo estos azúcares son difíciles de digerir cuando se padece Síndrome de Intestino Irritable (SII) pero es controlable llevando una dieta baja en FODMAP.
La gripe estomacal o gastroenteritis viral, puede ser causada por un virus, una bacteria o parásitos, se acompaña de diarrea, vómito, dolor de cabeza, fiebre y escalofríos.
Esta se transmite a través de alimentos contaminados o por contacto con personas que estén infectadas y puede derivar en una deshidratación.
Una úlcera gástrica o úlcera péptica perforada puede también ser una causa del dolor, esto es cuando el revestimiento estomacal o el duodeno tienen una llaga que no se cura y comienza a filtrarse el ácido estomacal.
Los síntomas de esto son ardor intermitente durante muchos días, sensación de malestar entre comidas o por las noches y desaparecer al consumir un antiácido o algún alimento.
Su principal causa es la infección por Helicobacter pylori, el consumo excesivo de algunos medicamentos, el estrés y los atracones de comida, muy comunes cerca del fin de año.
Sin embargo, es importante considerar que también hay malestares provenientes de otras partes del cuerpo y se sienten en el estómago.
Por ejemplo malestares en páncreas, apéndice y vesícula biliar pueden ser fácilmente confundidos con un malestar estomacal, incluso un padecimiento de cálculos biliares puede como síntoma tener malestar crónico del estómago.
Finalmente, el Dr. Quigley enfatizó la importancia de acudir a urgencias cuando el dolor se presente de manera repentina y muy intensa o cuando es un dolor que ha estado presente por varios días.
Una de las cosas más importantes que recomienda, es no automedicarse pues esto puede disfrazar síntomas de padecimientos más graves o producir un problema mayor a largo plazo.
No obstante, en última instancia es fundamental cuidar la salud moderando el consumo de alimentos y bebidas durante las celebraciones de Navidad.