¿Por qué Xi Jinping podría desairar invitación para asistir a la toma de posesión de Donal Trump?
Expertos y analistas ven poco probable que el presidente de China, Xi Jinping viaje a Washington para la ceremonia de investidura de Donald Trump pese a haber sido invitado por el mandatario electo.
Según detallan medios norteamericanos Jinping se hará presente en la ceremonia, que se llevará a cabo el 20 de enero, con la representación del embajador de China en Estados Unidos y su esposa, como es lo habitual.
A ellos podrían sumarse otros altos funcionarios en representación del Gobierno de Jinping. No obstante, ni la embajada china en Washington ni el equipo de transición de Trump han hecho comentarios al respecto.
Karoline Leavitt, la próxima portavoz de la Casa Blanca, confirmó durante el jueves que Xi había recibido una invitación para la investidura.
“Este es un ejemplo de cómo el presidente Trump crea un diálogo abierto con líderes de países que no solo son nuestros aliados, sino también nuestros adversarios y nuestros competidores”, dijo Leavitt a la cadena Fox News.
Danny Russel, vicepresidente de seguridad internacional y diplomacia en el Asia Society Policy Institute, cree que Xi Jinping no permitirá ser reducido al estatus de un mero invitado celebrando el triunfo de un líder extranjero, mucho menos del presidente de Estados Unidos, señalan expertos y analistas
“¿Puedes imaginarte a Xi Jinping sentado al aire libre en Washington, D.C., en enero a los pies del podio, rodeado de miembros belicistas del Congreso, mirando hacia Donald Trump mientras entrega su discurso de toma de posesión?”, indicó a Associated Press.
En la misma línea, Yun Sun, directora del programa de China en el Stimson Center, planteó que el tema del protocolo podría generar algún tipo de incomodidad en el presidente chino.
“No creo que los chinos tomen el riesgo”, dijo Sun, explicando, por ejemplo, que además podría estar presente el principal diplomático de Taiwán en Estados Unidos, quien precisamente asistió a la ceremonia de juramento del presidente Joe Biden en 2021.
Es de mencionar que Pekín reclama la soberanía sobre Taiwán, a la que considera una provincia rebelde desde que en 1949 los nacionalistas del Kuomintang se replegaron en la isla tras perder la guerra contra el ejército comunista.
En medio de esta escalada de tensión asiática, el Ministerio de Defensa Nacional (MDN) de Taiwán señaló que la “amenaza” que representa China no ha parado de “evolucionar” desde 2022.
A su vez el diario Sun recordó que Trump ya advirtió que tiene planeado imponer aranceles de hasta el 60% sobre los productos chinos una vez que asuma.
Considerando esto, sostiene la experta, Xi “parecería un tonto” si decide ir, lo que sería inaceptable para Pekín.