Estados deben garantizar el empoderamiento económico y emprendimiento de las personas con discapacidad, y fomentar ambientes libres de discriminación y de barreras físicas en los centros de trabajo
Junio 19, 2022. – Tras culminar la participación de la delegación mexicana en la 15ª Reunión de Estados Parte de la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad (COSP15-CDPD), la cual se llevó a cabo en la sede de la Organización de las Naciones Unidas en Nueva York, se enunciaron los diferentes retos que enfrentan las personas con discapacidad, como discriminación y estigmatización, falta de inclusión y empoderamiento económicos, la pospandemia y los efectos negativos del cambio climático; así como las barreras que encuentran los Estados para la implementación de la Convención.
Durante su intervención como jefe de Delegación, Cristopher Ballinas Valdés, director general de Derechos Humanos y Democracia de la Secretaría de Relaciones Exteriores, recordó que “la Convención nace de dos elementos esenciales: la dignidad que es inherente a todas las personas independientemente de su condición física; y el reconocimiento de las barreras que limitan el disfrute pleno de los derechos de las personas con discapacidad” […] “Los Estados debemos recordar que cada barrera física en un recordatorio silencioso de que nuestras sociedades no son justas ni equitativas.
En las sociedades pospandemia debemos impulsar acciones diferenciadas para la protección de todos los derechos de las personas con discapacidad, para que nadie se quede atrás y nadie se quede fuera”.
México fue uno de los principales impulsores de la creación de la Convención sobre los derechos de las personas con discapacidad, misma que constituye el primer tratado sobre derechos humanos adoptado en el siglo XXI y el primero sobre los derechos de este colectivo.
Con esta iniciativa, México contribuyó de manera decidida a la construcción de la arquitectura internacional de derechos humanos, en favor de un grupo que históricamente había estado invisibilizado.
Por ello, se hizo un llamado a los Estados que no lo han hecho, a ratificar esta Convención y hacer frente a los retos que enfrentan las personas con discapacidad en contextos de conflictos, cambio climático y pobreza.
Cabe destacar que, en marzo de 2022, el Estado mexicano sustentó los Informes periódicos 2º y 3º combinados sobre la instrumentación y cumplimiento de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad.
Asimismo, a fin de delinear las estrategias y acciones a desarrollar en los próximos años para hacer frente a los retos que persisten en la materia y cumplir con las disposiciones establecidas en dicha Convención, entre otras cuestiones, se anunció la “Consulta Nacional de las Personas con Discapacidad”, a realizarse en 2022.
Durante los diálogos interactivos en temas de empoderamiento económico, México destacó que los Estados deben garantizar el empoderamiento económico y emprendimiento de las personas con discapacidad, y fomentar ambientes libres de discriminación y de barreras físicas en los centros de trabajo, así como impulsar el desarrollo pleno de personas trabajadoras con discapacidad.
Por ello, se consagró en la Carta Magna el derecho de las personas con discapacidad permanente a gozar de una pensión no contributiva que les permita mejorar su calidad de vida, brindando un recurso monetario encaminado a su empoderamiento económico.