Inhibe inflación crecimiento económico y capacidad de compra de consumidores

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Se traduce en consumidores con menor capacidad de compra y estancamiento de ventas

 

Ciudad de México, 03 de junio de 2022.- Ante presiones inflacionarias se desacelera el flujo de ventas. De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) el consumo en México cayó en mayo 1.5 por ciento.

Ante mayores tasas de interés que encarecen el crédito y las condiciones complicadas del mercado laboral, analistas consideran que desacelerará el dinamismo de la actividad económica en los próximos meses, que seguirán impactando en el bolsillo de los consumidores.

Recién, el Banco de México ajustó a la baja sus pronósticos de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), a 2.2 por ciento del 2.4 por ciento a 2.2 por ciento para 2022 y de 2.9 por ciento a 2.4 por ciento para 2023; por lo que los analistas siguen anticipando un aumento de 75pb en la tasa de referencia y una tasa al cierre del año en 8.75 por ciento por parte de Banxico.

De acuerdo con los resultados de la Encuesta sobre las Expectativas de los Especialistas en Economía del Sector Privado que realizó Banxico en el mes de mayo, se anticipa que la inflación general y subyacente alcancen un nivel de 6.81 por ciento y 6.38 por ciento, respectivamente, al cierre del año.

Las expectativas inflacionarias para 2023, anticipan, serán de 4.34 por ciento y 4.14 por ciento.

Asimismo, la estimación de inflación de largo plazo aumentó a 3.60 de 3.55 por ciento.
Al respecto, el director ejecutivo de BlackRock, Larry Fink, dijo que espera que la inflación se mantenga elevada durante varios años, principalmente debido a la interrupción de las cadenas de suministro mundiales, las cuales se ha visto agravada por el COVID y los cierres en diferentes partes del mundo. Es decir, hay más oferta que demanda, por lo tanto los productos pasan más tiempo en la bodegas, afectando la rotación de inventarios.

Un día antes de la declaración del CEO de Blackrock, el titular de JPMorgan Chase & Co., Jamie Dimon, advirtió a los inversionistas que se preparen para un “huracán” económico y desafíos como un endurecimiento de la política monetaria en Estados Unidos; mientras la Reserva Federal trata de controlar una inflación que ha alcanzado su punto más alto en cuatro décadas.

Sin duda este pronóstico impacta la economía de México, que, de acuerdo con los resultados mixtos en indicadores cíclicos de marzo apuntan a una desaceleración de la actividad productiva.

El indicador coincidente se ubicó por arriba de su tendencia de largo plazo con un valor de 100.8 puntos, 0.26 puntos por arriba de febrero.

Detalla dicho indicador que, por componentes, los mayores aumentos se observaron en las importaciones totales, seguidas por el indicador de actividad industrial.
Tanto el Indicador Global de Actividad Económica como el de ventas al menudeo aumentaron 0.17 puntos respecto al mes previo.

En cuanto al indicador adelantado de abril éste se colocó por arriba de su tendencia de largo plazo, en 100.7 puntos, una disminución mensual de -0.14.
El indicador coincidente acumula 22 meses consecutivos de variaciones positivas, mientras el adelantado suma 9 meses con cambios negativos, apuntando a una desaceleración en la actividad económica en los siguientes meses en nuestro país.
Mientras que el indicador de confianza del consumidor registró un retroceso, pues las compras de bienes durables por parte de las familias, comparadas con las de hace un año es de apenas 0.9 puntos.

El sentir de los consumidores respecto a la situación económica del país con respecto a hace 12 meses también fue negativo, en (-)0.1 puntos.
Lo extraño del caso es que, la venta de autos en mayo alcanzó las 91,215 unidades, 5.2 por ciento de avance anual.

El resultado es favorable después de ocho caídas anuales consecutivas. En los primeros cinco meses del año la venta de autos fue 0.9% menor que la de enero-mayo de 2021, claro que se puede explicar por la demanda en lista durante los dos años de pandemia.