En la escuela, el cuidado de los niños con diabetes son tarea de padres y maestros

Diabetes en niños debe tener cuidados específicos con el fin de asegurar ambientes seguros e inclusión en las escuelas

 

Tomar en cuenta las recomendaciones de los expertos, es clave para niños con diabetes y crear ambientes seguros en la escuela para su pleno desarrollo.

Científicos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) señalan que cada vez más niños de 8 años o más han sido diagnosticados con diabetes tipo 1, la más común en etapas tempranas, y tipo 2. En este sentido, en la más reciente década diversas poblaciones han reportado un incremento de hasta 45% de diabetes tipo 2. Se calcula que entre un 25 y un 30% de los niños mexicanos que padecen diabetes t2. Afortunadamente, es prevenible si se evita el sobrepeso o la obesidad, lo cual es posible a través de una alimentación sana, actividad física y otros hábitos saludables.

Sin embargo, también es indispensable para los menores con diabetes que existan ambientes seguros, por ejemplo, la escuela. En estos recintos, tanto profesores como el ambiente, deben favorecer el desarrollo de los niños con diabetes en ambientes de seguridad e inclusión.

Ante ello, la doctora Carmen Alicia López Forero, gerente médico de insulinas de Novo Nordisk, compartió a NotiPress que los niños con diabetes deben contar con una atención confiable. «Es necesario que los padres informen al personal y estén en contacto con sus hijos para monitorear su estancia en la escuela sin poner en riesgo su salud«, comentó a través de un comunicado de prensa.

De la misma manera López Forero recomendó a los padres preparar una lista de verificación para asegurar que en su mochila estén todos los suministros que necesita el niño. Desde un glucómetro, baterías de repuesto, tiras reactivas, insulina y plumas para administrar, hasta toallitas antisépticas, carbohidratos de acción e incluso caramelos para elevar los niveles de azúcar.

También, los padres deben crear un plan personalizado para el manejo y tratamiento de la diabetes de su hijo y revisarlo con los profesores y personal médico. «En este plan es necesario especificar el nivel de azúcar en la sangre deseado y explicar cómo medirlo, incluso deben estar al tanto de los alimentos permitidos y tiempos de comida«, explicó.

Igualmente, los niños con diabetes deben participar en las actividades deportivas como todos los demás alumnos. Por tanto, los padres deben informar a maestros y preparadores físicos la forma adecuada de manejar la actividad física e identificar episodios de hipoglucemia o baja azúcar en la sangre.

«Los padres deben hacer saber a los maestros cuáles son las señales específicas de hipoglucemia, por ejemplo, temblores, nerviosismo o ansiedad, sudoración o escalofríos, irritabilidad o fatiga«. Así lo expresó la doctora López Ferero quien agregó que si un maestro identifica varios de estos síntomas, debe ponerse en comunicación con los padres o el médico del menor.

Bajo ese contexto, la Fundación para la Diabetes Novo Nordisk recomienda las siguientes acciones para facilitar la integración y el desarrollo del niño con diabetes en la escuela. Primero, es importante ajustar el tratamiento de niños y adolescentes según los niveles de glucosa en cada momento. Asimismo, si los menores necesitan inyecciones de insulina, los profesores deben estar al tanto e incluso saber la forma correcta de aplicación en caso de una emergencia.

Otros puntos importantes son si los niños con diabetes deben medir sus niveles de glucemia, deben ser supervisados por un adulto y facilitar estas mediciones en clase o un lugar higiénico. Aunado a ello, los niños deben seguir su plan de comidas que en general son similares a la dieta correcta de un niño sano y respetar sus horarios de alimentos.

Respecto a la actividad física, el niño debe tener acceso fácil a la glucosa u otro hidrato de carbono el cual sirva para tratar prevenir la hipoglucemia. Si el ejercicio es prolongado, debe tomar un suplemento de 10 a 15 gr de hidratos de carbono cada media hora.

Después del ejercicio, el niño con diabetes debe medir sus niveles de glucemia para saber si necesita alimento extra. Si la glucosa es baja, no es recomendable el uso de insulina.