Según un informe preparado por el FBI, el asesinato y el asalto elevaron sustancialmente las cifras de crímenes violentos en Estados Unidos durante 2020
EEUU.- De acuerdo con un informe realizado por el Buró Federal de Investigaciones (FBI) en Estados Unidos, en 2020 se registró el primer aumento de crímenes violentos en cuatro años. Ello, a pesar de las medidas de restricción impuestas por la pandemia de Covid-19, que reporta 688 mil 550 personas fallecidas. Agregados todos los crímenes reportados, esto representa un aumento de 5.6 por ciento con respecto al 2019 y da una tasa de alrededor de 375 ofensas por cada 100 mil habitantes.
La información fue presentada en la edición de 2020 del reporte anual del FBI, El Crimen en Estados Unidos, compilada por 18 mil agencias que voluntariamente participan en el Programa de Reporte Uniforme del Crimen. Los actos ilegales tomados en cuenta para el reporte fueron el asesinato, intencional o no intencional, la violación, el robo a mano armada y el asalto.
Detalla en informe, se estimaron un total de un millón 277 mil 696 crímenes violentos en 2020. En particular, el asalto y el asesinato fueron los que alzaron estas estadísticas, creciendo el primero en 12.1% y el segundo por 29.4%. La violación y el robo a mano armada, por su parte, disminuyeron; el primero en 12% y el segundo en 9.3%. Según cálculos del FBI, se realizaron un total de 7.6 millones de arrestos, excluyendo aquellos provocados por violaciones de tráfico.
Por otra parte, de acuerdo con el reporte, los delitos a la propiedad disminuyeron en 7.8% durante 2020, con respecto al año 2019. En ese sentido, el robo a inmuebles disminuyó en 7.4%, el hurto en 10.6%, aunque el robo de vehículos aumentó en 11.8%. En suma, se reportó un total de 6 millones 452 mil 38 delitos de este tipo, con un estimado de 267 por cada cien mil habitantes.
Si bien estas cifras corresponden a un periodo en el que el expresidente Donald Trump aún gobernaba, el actual mandatario Joe Biden anunció desde el inicio de su gobierno medidas para mejorar la seguridad. Principalmente, definió una estrategia centrada en el control de armas, particularmente los rifles de asalto, involucrados en el 85.5% de las muertes por tiroteo desde 1981.
También, según anunció en junio 2021, se invertirá en estrategias de intervención comunitaria y empleabilidad para disminuir las tasas de crímenes violentos. Las cifras anteriores revelan que el 2020 ha sido el año más violento de Estados Unidos desde 2015, destacándose particularmente el asesinato y el asalto.